El Fedón es uno de los diálogos más conmovedores de Platón. No solo porque retrata la última conversación de Sócrates antes de beber la cicuta, sino porque condensa su visión más radical sobre el alma, el cuerpo y el papel de la filosofía. Más que un tratado sobre la inmortalidad, esta primera parte del diálogo (hasta 69d) es una meditación sobre cómo debe vivirse —y morir— quien busca la verdad.

El núcleo del argumento no es todavía demostrar que el alma es inmortal, sino mostrar que el filósofo está preparado para morir, porque toda su vida ha sido una preparación para ese momento. Filosofar, en este sentido, es ensayar la muerte.
Personajes principales
- Fedón, discípulo de Sócrates, narra retrospectivamente la escena a Equécrates.
- Simmias y Cebes, discípulos del pitagórico Filolao, encarnan la razón crítica pero abierta.
- Sócrates, en sus últimas horas, conversa con humor, lucidez y valentía.
- Eveno, personaje ausente pero relevante para introducir la relación entre poesía y filosofía.
1. El filósofo y la muerte (en las partes del Fedón: 61a–62a)
Sócrates ha sido condenado, y sus amigos se enteran de que la nave sagrada ha regresado a Atenas. Es momento de la ejecución. Al llegar a la cárcel, encuentran a Sócrates relajado, conversando, incluso componiendo poesía. Cuando Eveno pregunta por qué, Sócrates dice que lo hace como una forma de cumplir con los mensajes de sus sueños: “haz música”.
Pero pronto la conversación gira hacia un punto crucial: ¿por qué no teme la muerte? ¿No es absurdo que un filósofo, que valora la vida racional, acepte la muerte con tanta serenidad?
Sócrates responde: el objetivo del filósofo es prepararse para morir (64a). No porque desee morir, ni porque el suicidio esté permitido (pues somos posesión de los dioses), sino porque la muerte es la separación del alma y el cuerpo, y eso es precisamente lo que el filósofo ha estado ensayando toda su vida.
2. Tres dualismos fundamentales
A lo largo de esta primera parte, Platón introduce tres dualismos (divisiones de la realidad) centrales: para comprender su filosofía. Muchos todavía creen en ellos, de alguna manera u otra
A. Dualismo antropológico
El ser humano está compuesto de cuerpo y alma (psique, para los griegos antiguos). Pero el cuerpo —fuente de deseos, dolores y confusión— obstaculiza el trabajo del alma. El alma, en cambio, es el principio racional y eterno. En el diálogo se lee:
“Los filósofos ya están medio muertos, no les interesa lo que a los demás” (64d–e)
Por eso el filósofo verdadero desprecia los placeres del cuerpo (comida, sexo, poder) y se ocupa del alma. Vivir bien es vivir para el alma, no para el cuerpo.
B. Dualismo epistemológico
Si el cuerpo nos da acceso al mundo sensible —pero este está lleno de apariencias, confusión, engaño—, entonces solo el alma puede conducirnos al conocimiento verdadero.
“¿Acaso es otra cosa [la muerte] que la separación del alma del cuerpo?” (64c)
Las Formas —lo justo, lo bello, lo bueno— no se ven con los ojos, ni se tocan con las manos. Se conocen con la inteligencia. Por eso el filósofo cultiva el pensamiento puro, y desprecia los sentidos.
C. Dualismo ontológico
Este es quizás el más profundo. De acuerdo con Platón, hay dos tipos de realidad.
- El mundo físico, sensible, cambiante
- El mundo de las Formas, eterno, inmutable
El primero es engañoso. El segundo, accesible solo por el alma (psique). De acuerdo con Platón, si queremos conocer lo real, debemos alejarnos de los sentidos y acercarnos a lo inteligible.
“Mientras tengamos el cuerpo… jamás conseguiremos suficientemente aquello que deseamos: la verdad.” (66b)
3. La filosofía como purificación
Para Platón, este triple dualismo lleva a una consecuencia ética: la filosofía es un proceso de purificación. No se trata de moralismo ni ascetismo, sino de un ejercicio racional: el alma se libera del cuerpo para acercarse a la verdad.
Por eso, afirma Sócrates, el filósofo se entrena en morir. El alma purificada es la única capaz de llegar a conocer lo que es realmente justo, bello y bueno.
“Los que en verdad filosofan se ejercitan en morir, y el estar muertos es para estos individuos mínimamente terrible.” (67e)
4. Crítica a los falsos filósofos y metáfora órfica
No todos los que parecen moderados son filósofos. Algunos se abstienen de placeres por miedo a otros mayores. Cambian unos placeres por otros, pero no se purifican.
“Son moderados por una cierta intemperancia” (69a)
Sólo hay una “moneda” válida: la sabiduría. Los mitos órficos (que Platón adapta) dicen que quien no se ha purificado en vida, yace en el fango tras la muerte. Pero los que han renunciado a lo sensible, habitarán entre los dioses.
“Muchos son los portadores del tirso, pocos las bacantes” (69d)
Es decir: muchos aparentan filosofar, pocos realmente lo hacen.
5. Conclusión: la filosofía como ejercicio espiritual
Platón redefine la filosofía en esta primera parte del Fedón. No es un juego intelectual ni solo una actividad racional: es una forma de vida, un ejercicio espiritual que prepara el alma para su separación del cuerpo y su acceso al mundo verdadero.
¿Qué debes recordar de este Diálogo?:
- Lo justo, lo bello y lo bueno no pueden conocerse con los sentidos → tesis epistemológica
- Si no pueden conocerse con los sentidos, existen en otro mundo no físico → tesis ontológica
- No podemos conocer lo que no es físico mediante lo físico → tesis epistemológica
- El cuerpo es prisión del alma → tesis antropológica
- La muerte es la liberación del alma del cuerpo → tesis antropológica
- El alma impura no puede alcanzar lo verdadero → tesis epistemológica
- El filósofo busca conocer lo verdadero y purificarse → ética filosófica
- La filosofía es el camino hacia esa purificación
- Por eso, el verdadero filósofo no debe temer a la muerte
Cinco argumentos sintetizados
- Dualismo ontológico: Existen dos tipos de realidad: la sensible y la inteligible.
- Dualismo epistemológico: Solo con la mente pura se accede a la verdad.
- Dualismo antropológico: El alma (racional, inmortal) está atrapada en el cuerpo (sensual, corruptible).
- Muerte: Es la liberación del alma del cuerpo: un momento deseable para el filósofo.
- Filosofía: Es la práctica de esa liberación: despreciar lo físico, cultivar lo intelectual, purificar el alma.
Glosario clave
- Dualismo ontológico: Dos realidades: mundo sensible y mundo de las Formas
- Dualismo epistemológico: Dos formas de conocer: sentidos (engaño) y razón (verdad)
- Dualismo antropológico: El humano es cuerpo y alma, pero el alma es superior
- Filosofía: Ejercicio de purificación y preparación para la muerte
- Muerte: Separación del alma del cuerpo; no debe temerse, sino comprenders
Preguntas para discusión o reflexión final
- ¿Se puede realmente conocer sin los sentidos?
- ¿Es deseable vivir desapegado de los placeres corporales?
- ¿Tiene sentido pensar en el alma como algo separado del cuerpo hoy en día?
- ¿Qué tipo de vida sugiere Platón como “filosófica”? ¿Es vivible?
- ¿Cómo se compara esta visión con otras formas de entender la muerte (religiosas o científicas)?
¿Quieres saber más de FILOSOFÍA ANTIGUA? VE AQUÍ
¿QUE PENSABAN LOS ANTIGUOS GRIEGOS SOBRE EL ALMA? ¿ANTES DE PLATÓN? Haz click aquí:
Comentarios
Publicar un comentario